Portafolio personal

¡Hola  todos y todas!

Mi  nombre es Lidia, tengo 28  años y soy maestra de Educación Primaria en el Colegio San Gregorio de  Aguilar de Campoo. Soy tutora de 5ºA y las asignaturas que imparto son: Música, Lengua, Matemáticas, Ciencias Sociales, Arts and Crafts  y Religión.

Me hace mucha ilusión compartir  mi nuevo blog con todos vosotros. Será en este espacio donde a lo largo del curso SGLab, reflejaré mis experiencias educativas, impresiones y por  supuesto la evolución de  NUESTRO aprendizaje, que no me cabe duda, será muy enriquecedor.

A continuación, expondré mis reflexiones sobre mi práctica docente  y  algunas de las temáticas abordadas en el primer encuentro SGLab el pasado 6 y 7 de noviembre.

MI FORMACIÓN COMO DOCENTE

Fue mi afición por la Música  lo que hace unos años me llevó a realizar la carrera de Magisterio Musical pero al finalizarla,  acabé fascinada por el mundo de la Educación y  por ello, decidí continuar estudiando la Licenciatura en Pedagogía. Durante mi tiempo de formación académica, estudié inglés y profundicé a través de los cursos de extensión universitaria en lo que yo consideraba mis propios intereses educativos, entre los que se encuentran la educación especial y el trabajo de las emociones en el aula.

Mi experiencia como docente es muy breve, pero he de decir que  es en el aula donde realmente estoy aprendiendo a enseñar. Suscribo la opinión de Fernando Trujillo en su artículo cuando afirma que “Un docente se forma más por sus portafolios y las experiencias valiosas en las que ha participado, que por su CV y número de certificados”.

Estoy especialmente interesada en el  Aprendizaje basado en Proyectos y en las metodologías activas. Por ello, mis últimas cápsulas formativas han sido cursos online como AICLE (Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras), ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos) o Creatividad  y Aprendizaje Mediante Retos.

Una de mis figuras de referencia en Educación es el escritor y educador británico Ken Robinson, experto en la creatividad e innovación en la enseñanza. Os recomiendo su libro “El Elemento”. (Enlace al documento PDF de dicho libro.)

Hablando de libros, no puedo pasar sin comentaros  el que estoy leyendo estos días “Diario de un profesor novato”, de Michael Barlow, muy interesante para profesores principiantes y para lo que no son tanto ;-).

MI  PRÁCTICA  DOCENTE

Normalmente  mis alumnos se encuentran en grupos mixtos de cuatro. Hace relativamente poco que llevo a cabo esta distribución en el aula, pero la considero muy valiosa entre otras cosas porque exige a los alumnos consensuar planteamientos comunes y ponerse de acuerdo en qué principios de actuación seguir. Por otro lado, creo que trabajar en equipo fomenta el entusiasmo por el buen hacer y el sentimiento de pertenencia. Sin embargo, es muy importante establecer unas normas de trabajo en equipo como la distribución de roles y responsabilidades, además de trabajar paralelamente técnicas de cohesión de grupos.

Me gustaría destacar que también he observado buen trabajo con la clase dispuesta en forma de semicírculo, ya que el hecho de que los alumnos se puedan ver entre ellos mejora la comunicación en  gran grupo y además centran muy bien la atención.

También veo fundamental salir del aula de vez en cuando para llevar a cabo la realización de determinadas actividades.

TRABAJO  SOLO  O  EN  EQUIPO

Si bien es cierto que trato de coordinarme con mis compañeros, ésto no es siempre posible. El principal motivo suele ser la falta de tiempo, pero aún así, de forma habitual  hacemos un hueco semanal para asegurarnos que todos vamos en la misma dirección y hay una coherencia en las metodologías utilizadas.

Mi coordinación tiende a ser más estrecha con los profesores que imparten clase en mi mismo nivel y he de decir que tengo la suerte de trabajar con profesionales que abogan por un metodología de trabajo en equipo y coordinada, algo que debido sobre todo a mi falta de experiencia,  está significando un gran aprendizaje para mí.

Pienso que trabajar de forma individual como profesionales no solo no es beneficioso, si no que puede llegar a ser perjudicial para nuestros alumnos. Como docentes, hemos de ser conscientes que lo principal ha de ser facilitar  la tarea en el camino del aprendizaje y promover los buenos resultados académicos de los estudiantes. Por este motivo,  nosotros somos los responsables, ya no solo de trabajar con un objetivo común y en una misma dirección, si no de dar un verdadero sentido a este planteamiento y abrirlo e iniciarlo en toda la comunidad educativa.

APRENDER A TRABAJAR EN EQUIPO PARA ENSEÑAR A TRABAJAR EN EQUIPO. Es este uno de mis objetivos en SGLab. Como bien decíais en  alguno de los grupos “nosotros somos su reflejo” y malamente enseñaremos a nuestros alumnos a trabajar en equipo si nosotros nos sabemos hacerlo, pero cuidado, porque no basta con saber hacerlo si no que también hay que ponerlo en práctica. Es esta segunda parte la que yo considero más compleja y la que he de reconocer , es una de mis debilidades. Debilidad, que dicho sea de paso, trabajaré por dejar atrás a lo largo de este curso.

EVALUACIÓN

Es en este aspecto de la evaluación  en el que quizás yo encuentre más lagunas a nivel teórico-práctico.

Creo que  de alguna manera, aún sigue la latente en mi pensamiento la idea de evaluación como nota que califica quien lo ha hecho bien y quien mal sin tener en cuenta el proceso o lo más importante, de qué conocimientos previos ha partido un alumno para adquirir “x” resultados. Al mismo tiempo, esto es algo que choca  con la metodología de trabajo que llevo a cabo en el aula y por este motivo, quiero romper definitivamente con esta idea de evaluación  y centrarme en una evaluación formativa encaminada a analizar cómo los alumnos avanzan en cada proyecto y por tanto, en su aprendizaje.

Normalmente, antes de comenzar con una unidad didáctica independientemente de cuál sea la asignatura, llevo a cabo una evaluación inicial para detectar cuáles son los conocimientos previos de los alumnos sobre el tema a tratar y también para motivarlos sobre el contenido a trabajar. Generalmente, llevo a cabo esta evaluación a través de rutinas de pensamiento. 

Por otro lado, veo fundamental la autoevaluación y reflexión del alumnado con ayuda de rúbricas de evaluación u otros mecanismos de evaluación sobre su propio aprendizaje.

Para la evaluación actitudinal de mis alumnos utilizo diariamente la herramienta ClassDojo. Ésta me ha dado muy buen resultado , sobre todo de cara a promover las conductas deseadas en el aula y erradicar las no deseadas. Un plus  de esta aplicación es que las familias pueden seguir diariamente el comportamiento de sus hijos en el aula, y eso la hace aún más eficaz.

También considero que deben utilizarse cierta variedad de mecanismos de evaluación dependiendo del la fase de trabajo a evaluar (diarios de aprendizaje, portafolios, dianas de evaluación…etc.). Es en esta fase de la evaluación la que considero, tengo más difusa y en la que detecto más inseguridad a la hora de seleccionar un mecanismo u otro dependiendo de la actividad a realizar.

Como herramienta de evaluación docente, escribo un diario en el que reflexiono sobre puntos fuertes, débiles y a mejorar de cada proyecto/unidad para de este modo, optimizar  la calidad del trabajo en futuras ocasiones.

MEJORA CONTINUA DE MI PRÁCTICA EDUCATIVA

Afronto con mucho optimismo este curso, el cual estoy segura de que será una valiosa pieza más de aprendizaje en mi largo camino como docente.

Me despido con el vídeo de una charla TED que vi hace unos días sobre la enseñanza en este caso de las Matemáticas. Me resultó realmente inspirador  y a la vez me hizo reflexionar sobre el tipo de educación  que nos exigen los estudiantes de hoy en día. Espero os guste.

HASTA PRONTO J